La figura del administrador único se queda pequeña para las empresas que van creciendo y, por tanto, asumiendo tareas más complejas. Una única persona no puede asumir en solitario todas las demandas y necesidades que surgen en el día a día del funcionamiento del negocio. Se hace necesaria la presencia de una serie de asesores especializados en diferentes áreas, que aportan la profesionalidad que precisa una empresa para su correcto funcionamiento. Es entonces cuando ha de surgir el Consejo de Administración, el órgano de gobierno de la empresa, de carácter […]